Porque él era grande, era una persona muy grande. Era la mejor persona que nunca había visto. Y lo sigue siendo, ella no. Ella se siente pequeña, muy pequeña cuando está a su lado. Pero no le queda otra, solo agachar la cabeza y levantarla de vez en cuando para volver a mirar esos ojos que tanto le gustan.
Y le duele no poder besarle como antes lo hacia, no poder mirarle como le miraba hace tan solo uno días.
Una estupidez mas echada a la mochila de mierdas que llevo haciendo desde hace semanas.
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