Pececitos

domingo, 27 de febrero de 2011

No existe el amor, sino las pruebas de amor, y la prueba de amor a aquel que amamos es dejarlo vivir libremente.

Le necesitaba mas de lo que había llegado a imaginar. Sufría mas de lo pensado cuando estaba a su lado. No poder mirarle, o poder y no atreverse...
Porque él era grande, era una persona muy grande. Era la mejor persona que nunca había visto. Y lo sigue siendo, ella no. Ella se siente pequeña, muy pequeña cuando está a su lado. Pero no le queda otra, solo agachar la cabeza y levantarla de vez en cuando para volver a mirar esos ojos que tanto le gustan.
Y le duele no poder besarle como antes lo hacia, no poder mirarle como le miraba hace tan solo uno días.


Una estupidez mas echada a la mochila de mierdas que llevo haciendo desde hace semanas.

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